En la Zona Colonial existe un oasis que se convierte en un escenario idóneo para quienes buscan un alojamiento exclusivo, íntimo y que abraza la conservación del patrimonio. Es Casa Antillana, propiedad construida en la era colonial con techos clásicos romanos y arcos de ladrillo.
Casa Antillana
En la vibrante Ciudad Colonial de Santo Domingo, la Casa Antillana se erige como una joya escondida dentro del lujoso hotel boutique Casas del XVI. Esta residencia histórica, que data de finales del siglo XIX y principios del XX, se encuentra en la pintoresca calle peatonal Macorís, justo enfrente de la encantadora Casa Macorís.
La Casa Antillana destaca por su estilo tropical colonial antillano, una fusión que celebra la alegría y calidez de la región. El uso generoso de madera, mimbre, ratán y telas vibrantes contribuye a la atmósfera acogedora y colorida del lugar. La puerta principal, pintada en un fresco verde hoja, da la bienvenida a un espacio interior que refleja la esencia del Caribe.
El diseño interior de la casa es un deleite para los sentidos. Al entrar, los huéspedes son recibidos por un salón adornado con sofás de mimbre y ratán, complementados con telas vibrantes y paredes decoradas con detalles en madera y las exquisitas obras de Patricia Read, que capturan la esencia de la naturaleza en dos collages delicados. El flujo entre el patio y la terraza es fluido, gracias a las amplias puertas blancas que permiten la entrada de luz natural y la integración de los espacios.
En cada rincón de Casas del XVI, los visitantes se ven envueltos en una narrativa vibrante que entrelaza la rica historia dominicana con el lujo y la comodidad del estilo moderno. La Casa Antillana, en particular, emerge como un auténtico refugio tropical, ofreciendo a familias y pequeños grupos una experiencia íntima y sofisticada, mientras se hospedan en un ambiente exclusivo y cálido que encanta.
Los huéspedes pueden disfrutar de servicio personalizado como personal multilingüe, tratamientos de bienestar y oferta gastronómica.
El patio interior es dominado por un majestuoso árbol de uva de playa, que inspira el diseño de la piscina. Esta pieza de arte acuático presenta incrustaciones de hojas en vidrio templado, complementada por arcadas blancas y pasarelas de ladrillo antiguo que acentúan el carácter distintivo de la casa.
La Casa Antillana alberga tres habitaciones —dos Luxury Superior y una Superior Colonial Room— que abren hacia el exuberante patio. Cada habitación ofrece una personalidad única, con una combinación de texturas naturales y materiales auténticos. Los interiores están vestidos con algodones ligeros, lino blanco y textiles bordados que refuerzan la identidad de la casa. Los baños, amplios y luminosos, presentan pisos de madera pintados a mano y antiguas tinas restauradas que añaden un toque de sofisticación histórica.
La puerta principal de la Casa Antillana está enmarcada por un portal blanco que respeta la mampostería colonial original. Los terrenos de la casa pertenecieron a los frailes de la orden de Santo Domingo, cuyo templo y convento estaban ubicados al norte de la residencia.
Casas del XVI, situado en el corazón de la Ciudad Colonial, ofrece a sus huéspedes una inmersión en la rica historia y cultura de Santo Domingo. Desde su apertura en marzo de 2014, el hotel ha crecido de dos a ocho casas, dos de las cuales están dedicadas a eventos. Cada propiedad mantiene su carácter histórico, con techos romanos y arcos de ladrillo que han perdurado a lo largo de los siglos.
La colección de Casas del XVI se distingue por su compromiso con la preservación de la arquitectura y la celebración de la cultura dominicana.
